Una historia nos cuenta que una vez un rey tenía el capricho de saber cómo podía ser un elefante, puesto que no había visto ninguno. Para poder saberlo envió a sus sabios a un largo viaje para que vieran un elefante y le contaran como era. A la vuelta fue interrogándoles uno a uno.

Uno, el sabio encargado de la arquitectura, le contó que era un ser monumental, una gran obra de arquitectura inmensa.

Otro, el sabio encargado del arte, le contó que era el gris más perfecto que había visto nunca.

Otro, el sabio de las finanzas, le contó que era un gran gasto en alimentación.

El que se dedicaba a las telas, le dijo que era algo de mala calidad, demasiado áspero y burdo.

El sabio del transporte, le contó que era una máquina con mucha capacidad de carga.

El sabio del arte, le contó que no era demasiado agraciado en el movimiento.

Y así uno a uno le fue contado según su opinión.

Si no hubieras visto nunca un elefante ¿te quedaría a ti claro cómo es según lo que estos grandes sabios están contando?

Verdad que no!!!!!

Pues así mismo tendemos a percibir nosotros la realidad según nuestros propios criterios y filtros… la interpretamos según nuestras suposiciones previas…

Párate a pensar un momento qué papel juegan en tu vida tus suposiciones previas, qué ocurriría si vuelves a intentar otra vez algo que fue incómodo o desagradable, hay que seguir indagando, intentarlo más veces para tener más información, e incluso intentarlo de maneras diferentes….

Prueba a adoptar una mentalidad positiva y enfrentarte a los retos desde el sí se puede, sí es posible, lo voy a conseguir…

Y verás cómo las cosas pueden funcionar de una forma diferente!!!!!!!!!!!!!!